Adios Carrasco, Adios.

No sabemos si el momento elegido es el correcto, pero ahora es lo de menos, por fin nos hemos librado de ese personaje que ha paseado su arrogancía y su prepotencia por nuestra capital desde casi hace ya un año, el "Lobo" Carrasco ha sido sustituido y su lugar será ocupado por el que hasta ahora venía siendo el 2º entrenador, Fermín, un hombre de la casa que lo único que tiene que hacer el domingo es poner a los 11 mejores, recordarles que hay que ganar por lo criminal o por lo criminal y luego ya se verá. Confiamos en él para dotar al vestuario de confianza y optimismo cara al complicadísimo encuentro del domingo.

Los resultados deportivos de Carrasco a lo largo de la temporada son el único motivo por el que se le mantuvo, la trayectoria del club, todo hay que decirlo, ha sido muy positiva a lo largo de la temporada, y el cesar al entrenador en mitad de una eliminatoria decisiva no parece la decisión más acertada, pero si tenemos en cuenta que a lo alrgo de la temporada ha tenido ya varios enfrentamientos con aficionados, equipos rivales, prensa y que el domingo pareció haber ya perdido el norte del todo, se nos antoja una decisión coherente que esperemos no llegue demasiado tarde.

El domingo fue la gota que colmó el vaso. En primer lugar, dejó fuera del once al jugador más en forma del último tramo de la liga, Jaime, para poner en su lugar a uno de los futbolistas más mediocres de la plantilla como es Bruno. En el descanso del encuentro de Caravaca y viendo el repaso que el conjunto local nos estaba metiendo y que el resultado no era todo lo malo que podía ser visto el juego de ambos equipos, un veterano oviedista como Mario Prieto le pidió al entrenador que variase en cierta medida el sistema, que en ese césped no se podía tocar el balón y que era mejor estar todo bien juntos y jugar balones en largo para aprovechar alguna ocasión, es decir, imitar en cierta medida al equipo murciano, idea esta que no gustó al "Lobo" que siguió fiel a su filosofía de mejor perder el resultado pero no perder el estilo y así nos fue, eso si, sustituyendo rápidamente a Prieto que, por otra parte, estaba haciendo un partido horroroso. Esa desencuentro tuvo su continuación a la conclusión del encuentro cuando el entrenador se negó a salir en una entrevista junto a dicho futbolista, diciéndole al periodista que mejor entrevistara a Curro (sobre Curro y Meijide habría más que comentar, pero como ellos son unos de los que el domingo tienen que sacar las castañas del fuego, vamos a esperar de momento).

Si a eso le sumamos el enfrentamiento que tuvo con miembros del grupo, llegando a levantarle la mano a uno de ellos mientras nos llamaba niñatos antioviedistas a la conclusión del partido, los insultos al entrenador local y los desplantes sufridos por medios de comunicación que siguen al Oviedo, parece lógico que se le obligara a preparar las maletas cuanto antes, porque la situación se estaba poniendo muy tensa y a los jugadores hay que transmitirles confianza y calma de cara al domingo.

Carrasco fuera del club, solo cabe pensar quien trajo a semejante entrenador sin el más mínimo curriculum, los verdaderos responsables de nuestra actual situación se sientan en el palco y una vez haya finalziado la temporada, los que tendrán que rendir cuentas a la afición, son el consejo de aministración, con su máximo accionista, Alberto González a la cabeza.....si es que no se esconde en Cuba como hizo cuando las cosas iban mal en el Lacera Naranco, equipo que, por cierto, siguen dirigiendo y que ha descendido y está a punto de la desaparición, grandes gestores, si señor.